Decirle hasta luego al calor de casa para saludar al lugar que nos extrañaba desde la infancia. A esta altura de la vida hemos cambiado, pero nos seguimos reconociendo.
A la tierra de los abuelos le traemos los nietos. El amor llama y ‘Todos vuelven’ como dice una canción de Rubén Blades.
Deuda enorme y difícil de saldar la que tenemos con los abuelos que cuando pudieron estar haciendo mil cosas por ellos, se dedicaron a hacer una sola por nosotros: llenarnos de amor.
(Y de comida también)
COMPARTIR